Historia de la Filigrana de Papel

Una de las técnicas que más utilizo en mis creaciones es la denominada filigrana de papel. Esta es la historia de cómo se desarrolló.

Filigrana de metal

La filigrana es una técnica de orfebrería que consiste en confeccionar hilos muy finos con un metal, generalmente oro o plata, que conforman elaboradas piezas de joyería formando un patrón similar a un encaje. Para su elaboración se utilizan gotas muy pequeñas o hilos entrelazados, o una combinación de ambos, soldados entre sí a una lámina metálica. Una cualidad a destacar en la joyería de filigrana es su ligereza por excelencia. Los delicados diseños hacen de la ornamentación en filigrana un arte minucioso, en el que tanto los espacios ocupados como los vacíos tienen el mismo valor estético. Los hilos utilizados pueden ser lisos o retorcidos, utilizando para ello unas tenazas.

Los sitios arqueológicos encontrados en la antigua Mesopotamia indican que la filigrana se incorporó a la joyería ya en el año 3000 a.C.

Debido a su alto precio, no todos podían permitirse el lujo de adornar sus cuerpos y objetos con estas joyas, por lo que la gente comenzó a buscar una alternativa más económica para decorar.

Filigrana de Papel

La llamada Filigrana de Papel o “Quilling”, es un arte muy antiguo en la historia de la sociedad humana. Consiste en enrollar, acomodar, rizar o curvar finas (casi siempre) tiras de papel, dándoles forma y creando así los más variados, bellos y detallados diseños decorativos.

Enrollar papel, desdoblar papel, quilling, filigrana y mosaico son todos los nombres que se le han dado a este arte durante su larga historia.

Según la mayoría de reseñas históricas, su origen se remonta a la época de las culturas de China, Medio Oriente y el Antiguo Egipto. Algunas fuentes sugieren que muchas de las técnicas modernas que usamos hoy en día ya fueron utilizadas por ellos. La filigrana sobre papel está documentada desde el siglo XII, pero no maduró sino hasta los siglos XV y XVI, cuando los monjes y monjas de los conventos de Francia e Italia utilizan esta técnica para embellecer sus objetos religiosos, como pinturas y relicarios, logrando un trabajo de alta calidad. Enrollaron el papel alrededor de la base de plumas de ave (quill), de ahí su nombre en inglés “Quilling”. La conexión eclesiástica se mantuvo cuando el arte se dispersó hacia Inglaterra con el desarrollo del papel, aunque la vitela (piel de vaca o ternera curtida, muy pulida y extraordinariamente fina y flexible que se usa para pintar y escribir) y el pergamino, también se usaban. Las iglesias más pobres produjeron imágenes religiosas con decoraciones de papel enrollado; sin embargo, cuando estaban plateadas o doradas, era difícil distinguirlas de las verdaderas filigranas de plata y oro.

Durante el siglo XVIII, en Inglaterra, este arte fue muy practicado por las damas de la alta sociedad de la época, utilizándolo en la ornamentación de diversos objetos, como cajas decorativas, marcos, escudos de armas, y muebles elaborados especialmente para tales fines. Son especialmente famosas las cajas de té, que hasta el día de hoy se exhiben en museos de este país.

   Posteriormente, este arte se trasladó a América del Norte llevado por los colonos anglosajones, donde su popularidad siguió creciendo. Sin embargo, debido a la falta de muestras históricas, la filigrana parece haber perdido su popularidad a fines del siglo XIX.

En América Latina, el conocimiento y la práctica de este arte están menos difundidos, pero este panorama está cambiando, ya que cada vez más personas se interesan por aprenderlo.

Actualmente, existe un resurgimiento y revalorización de este arte como técnica decorativa aplicada a diversos objetos. La Filigrana parece querer volver a la vida con un movimiento creciente para preservar y exhibir fotografías. Se utiliza con frecuencia para acentuar fotografías enmarcadas, invitaciones de boda y otros momentos importantes de la vida. La filigrana de papel también se utiliza ampliamente en la creación de álbumes de recortes y tarjetas de felicitación, donde las formas distintivas de la filigrana agregan una dimensión y una belleza increíbles.

En algunas partes del mundo también existen gremios de artesanos que conocen y practican esta milenaria técnica artística. Se reúnen para intercambiar conocimientos y promover este arte para evitar su extinción y transmitirlo a las generaciones futuras. Los más antiguos y reconocidos son The Quilling Guild, en el Reino Unido (es el gremio más antiguo) y The North American Quilling Guild.

En comparación con otros pasatiempos, la filigrana de papel es económica. Los materiales básicos son fáciles de conseguir y se puede practicar en casi cualquier lugar. Con esta información como base, te invito a adentrarte en este fascinante y relajante mundo.

Isa Sattaf

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